La coordinadoa nacional de Misones de la orden en España, Eloisa Pérez, declaró hoy a Servimedia que las religiosas que trabajan en Cuba albergan la esperanza de que esta apertura se pueda hacer realidad tras la visita de Juan Pablo II.

Eloisa Pérez señaló que tras la revolución cubana y la llegada de Fidel Castro al poder, las religiosas que desarrollaban su labor en ese país tuvieron que limitar sus trabajos a las iniciativas relacionadas con la asisencia social, teniendo que abandonar las tareas educativas que esempeñaban.

Las monjas españolas de la orden de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl que trabajan en Cuba desarrollan su actividad fundamentalmente en leproserías y en comedores destinados a atender a personas que sufren una carecencia absoluta de recursos