El primer y el tercer puesto a nivel de altura es para dos pedanías. La primera es para Pradollano en Granada y la tercera para la pedanía de La Herguijuela en Ávila, pero en lo que se refiere a municipios, Valdelinares ocupa el primer puesto.

Dentro del 'top diez' se cuela además una pedanía aragonesa: Cerler. Perteneciente al municipio de Benasque, se encuentra en el puesto número siete. Además, el puesto número doce es para el municipio, también turolense, de Guadalavar. Todos estos municipios aragoneses, además de por su altitud, destacan por un patrimonio histórico muy importante, tradiciones ancestrales y un increíble entorno natural que los convierten en verdaderas joyas dentro de Aragón.

EL MÁS ALTO

El pueblo turolense de Valdelinares es el municipio más alto de toda España y el segundo en el ranking si tenemos en cuenta la pedanía de Pradollano. Ubicado por encima de los 1.600 metros de altitud, en este lugar la manta no molesta en verano. Tiene un total de 88 vecinos censados y en la plaza del pueblo es mejor no intentar acceder durante el invierno por la alta cantidad de nieve.

La temporada de invierno es muy dura, las primaveras y otoños lluviosos y las tormentas son especialmente intensas. En plena sierra de Gúdar y junto al pueblo se encuentra la estación de esquí de Aramón Javalambre, la estación preferida por los valencianos y uno de los atractivos que hace conocida a la localidad.

Poco o nada tiene que ver este pueblo turolense de la sierra de Albarracín con Grecia, que está reconocido como el cuarto municipio más alto de España. Supera los 1.600 metros sobre el nivel del mar y cuenta con un total de 130 vecinos. Sdemás de por su altura, es reconocido por ser la sede el Museo de Mariposas, donde se expone una rica colección de insectos como la Graellsia Isabellae, una de las más bonitas del mundo.

Otro de los animales que le ofrecen una belleza excepcional a este lugar son los ciervos, que durante el otoño, se les escucha berrerar en las zonas boscosas y es todo un espectáculo de la naturaleza. Se encuentra muy cerca del Parque Natural del Alto Tajo y en los alrededores del pueblo hay espectaculares lugares para hacer senderismo, pinturas rupestres y parajes como Noguera, Orihuela del Tremendal o Bronchales.

El quinto puesto con 1.581 metros es para la localidad de Gúdar y que llama la atención porque el pueblo es un mirador y desde prácticamente todas las calles se pueden contemplar unas maravillosas vistas. Ubicado en Teruel, cuenta con un total de 76 habitantes y entre algunos de los platos típicos del lugar destaca el potaje de garbanzos con morro y chorizo, la tortilla con pan y ajo o las migas con torreznos.

A modo de curiosidad, a 150 metros del casco urbano, se encuentra la fuente de Abajo y en época estival, los vecinos bajan diariamente a por agua como lo hacían antiguamente. Cercano a Gúdar, se encuentra el pico Peñarroya, el más alto de Teruel con una altura de 2.024 metros desde donde se pueden disfrutar unas espectaculares vistas panorámicas que se extienden hasta la comunidad valenciana.

Conocido como 'Balcón de España', Bronchales es el sexto clasificado en este ranking de las alturas. Con 432 habitantes es la que mayor población tiene de los diez pueblos más altos de España. Se encuentra a una altitud de 1.575 metros y es tal su relevancia que sale incluso mencionado en el Cantar del Mío Cid.

Bronchales conserva un gran patrimonio cultural y cuenta con un entorno natural de gran riqueza. Algunos de los monumentos más destacados son la ermita de los Santos de la Piedra, la iglesia de la Asunción o la ermita de Santa Barbara. En los alrededores se puede visitar una de las masas de pinares mejor conservada en España que albergan gran cantidad de vegetación y fauna y que es posible recorrer a través de diferentes senderos y rutas.

El puesto número doce de la lista es Guadalaviar, una pequeña localidad a 1.519 metros de altitud que vive principalmente de la ganadería y donde las mantas y los pijamas de invierno son necesarios también en verano. Cuenta con una trayectoria histórica de trashumancia, una tradición ancestral de vital importancia en este pueblo que cuenta incluso con un museo. Desde aquí, una superficie de pinares se prolonga hasta el pueblo de Griegos. A muy pocos kilómetros se encuentra el nacimiento del río Tajo y multitud de fuentes surgen en las cercanías del pueblo.