"Zapatero-Calleja, aventura en la montaña", es un reportaje protagonizado por dos personas muy especiales. Calleja es un guía original que conoce este parque natural como la palma de su mano y Zapatero es el presidente del Gobierno, un oficio que rara vez permite tener ganas, tiempo y capacidad de ascender acasi mil metros de altura en una jornada extenuante y con cierto peligro, según informa Cuatro.

La aventura se inicia un viernes por la tarde. Zapatero llega a Posada de Valdeón (León) y tras saludar a los vecinos y autoridades, se arranca con Jesús en un paseo de dos kilómetros hasta el Mirador del Tombo, un recodo en la carretera desde el cual se contempla de forma espectacular ángulos distintos de los Picos de Europa. Desde allí observan la ruta del objetivo marcado, el refugio de Collado Jermoso, el más recóndito y alejado de los que existen en la cordillera.

Un anciano espontáneo le cuenta al presidente que él ha hecho esa ascensión en el tiempo récord de dos horas. Y Zapatero le mira incrédulo, porque ha veraneado aquí durante muchos años en su infancia.

El presidente hace 15 años que no pisa estos montes y se muestra emocionado, a pesar de que su paseo se convierte en una extraña procesión de vecinos y miembros de las fuerzas de seguridad.

De vuelta a grandes zancadas, con el séquito chorreando, porque es una subida considerable, una tormenta interrumpe la caminata. No está claro si es sólo un chaparrón de verano o un frente que pueda dar al traste con los planes.

Por la noche cenan juntos en el hotel rural con los primos de Zapatero y el hermano de Jesús. Calleja entretiene a los demás contando la dificultad de su próximo reto: el "Makalu", la quinta montaña más alta del mundo.

Zapatero cuenta que corre entre tres y cuatro horas por semana, y que eso le mantiene despejado y en buena forma física. Pronto visitará Nueva York y quiere hacer "footing" en el Central Park.

En mitad del prado, a las ocho de la mañana y el cielo despejado, aunque en la montaña hay nubarrón, esperan unos ochenta periodistas. Es un madrugón (Posada de Valdeón está a dos horas de León), para hacer una foto inédita: el presidente del Gobierno con zapatos de montaña, mochila y bastón de "trékking", promocionando los Picos de Europa y los valores del montañismo.

La ascensión a Collado Jermoso empieza muy fuerte. El primer tramo es tan vertical que hay que agarrarse a las rocas con la mano. Este itinerario, el Sedo de Pedalejo, una propuesta de última hora de Jesús, mantiene al equipo en suspense. Es fácil resbalarse y caer muchos metros rodando. Pero también aporta adrenalina y una vista impresionante sobre los Picos. Superado este tramo, la ruta asciende entre las montañas.

Cuatro horas y 800 metros de desnivel en una ruta exigente acaban en el refugio de Collado Jermoso, un pequeño edificio colgado de un prado al borde de un precipicio desde donde salen las ascensiones al Llambrión, el monte más alto de Castilla y León. Jesús Calleja y ZP reponen fuerzas con un almuerzo traído de Moncloa.

La pequeña expedición termina tarde ese día, después de haber vivido 24 horas una experiencia singular. Nunca antes elpresidente de Gobierno había dedicado a ningún medio ni a ninguna actividad tanto tiempo continuado.