El informe indica que pese a qu España fue el primer país de la UE en ratificar el Protocolo de Kioto, ocupa "la posición más precaria", ya que sus emisiones de CO2 aumentaron un 35,12 por ciento en 2000 respecto a los niveles de 1990. Además, los investigadores del CSIC calculan que en 2002 el incremento estará cercano al 50 por ciento.

La UE se comprometió a reducir un 8 por ciento sus emisiones en el período 2008-2012 respecto a los niveles de 1990. Para lograr ese objetivo, cada país asumió una responsabilidad en función de lasemisiones que registraba en 1990. En el caso de España, se le autorizó un aumento del 15 por ciento.

Sin embargo, ese margen ya ha sido ampliamente superado. Para el investigador Félix Hernández, coordinador del estudio del CSIC, "atendiendo a los esfuerzos realizados desde 1990 para mitigar la emisión de gases con efecto invernadero, la posición española no justifica la reclamación de un mayor margen".

Por el contrario, los autores del informe indican que otros países, como Irlanda, muestran unaevolución a la baja de sus emisiones, que le permitirá converger a finales de este año con la disminución que persigue la UE, e incluso se situará por debajo en 2004.

"Esta situación paradigmática", señaló Hernández, "se debe a que Irlanda ha realizado esfuerzos en la renovación de sus infraestructuras, la apuesta por energías limpias e innovaciones tecnológicas, que han favorecido el paso del signo positivo al negativo".

Según el coordinador del estudio, los datos tan negativos que presenta Espaa podrían justificarse pensando que "la asignación del 15 por ciento de incremento resultaba insuficiente, idea que parece verse reforzada por la posición de otros países europeos".

En este sentido, apuntó que a países como España, Grecia, Irlanda y Portugal se les debía haber asignado unos márgenes mayores de aumento de emisiones, aunque señaló que el progresivo e importante incremento que registra España le puede hacer perder "argumentos para una potencial revisión de la cuota que le fue asignada". "España", agregó Hernández, "llegará con agujetas a la etapa de entrenamiento que se abrirá en 2005 si no se adoptan las medidas necesarias". Ese año entrará en funcionamiento el mercado de intercambio de emisiones.

Este mecanismo creará un mercado de "compra-venta" de emisiones entre aquellos países que superan las emisiones asignadas y los que se sitúen por debajo y que tendrán derechos de emisión al resto.

Hasta finales de 2007 no habrá objetivos jurídicos vinculantes que limiten las emisines de gases de efecto invernadero en los Estados miembros, pero a partir de 2008 se llevará a cabo un ajuste a los objetivos de Kioto, de acuerdo con los inventarios nacionales.

Además del mercado de "compra-venta" de emisiones existen una serie de mecanismos que permitirán a los países que superen su cuota reducir las emisiones brutas, como la exportación de proyectos de tecnología limpia a países en desarrollo o el descuento de emisiones de CO2 mediante los denominados "sumideros" de carbono, es deir, contabilizar el efecto de absorción de este gas por los bosques y algunos cultivos, de tal forma que los países con más masa forestal saldrían beneficiados.

En cualquier caso, el estudio del CSIC estima que en 2007 España ya habrá "consumido" todo su margen de incremento de emisiones y a partir de 2008 tenderá a aumentar progresivamente su diferencia con la media europea.

Los investigadores del Instituto de Economía y Geografía del CSIC analizan también la evolución de las emisiones en los ditintos sectores industriales: construcción, cerámica, cemento y vidrio, petróleo y refinería, energético y papelería.

"Estos sectores, que están obligados a cumplir con las cuotas, no se comportan igual, siendo el del cemento el que mejor está evolucionando", manifestó Félix Hernández.