Los funcionarios que trabajan en estas instalaciones ya habían denunciado que los techos de sus oficinas están abombados y se han escuchado en algunas ocasiones que se desprenden trozos de cascotes que caen sobre el falso techo de escayola.

Por todo, CSI-CSIF deuncia un "peligro grave e inminente de desprendimiento de los techos sobre las cabezas de los empleados públicos".

En un informe del sindicato, al que tuvo acceso Servimedia, se denuncia que las sedes judiciales incumplen en su mayoría la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, como lo demuestra que el 70% de los juzgados no es accesible para discapacitados.

La mayoría de los juzgados "tienen condiciones de trabajo que, de tratarse de una empresa privada, podrían llevarla a juicio" en esas mismassedes, "que deberían ser un ejempleo para la sociedad y no hacer que los ciudadanos se pregunten por qué las conductas deellos son castigadas y no sucede lo mismo cuando esas conductas las realiza la Administración".