A su juicio, la confrontación entre el Gobierno y el PSOE pone de manifiesto la contradicción entre una política "conservadora en lo económico y restrictiva de libertades, y un discurso, a veces populista, dirigido a una base que suele ser de izquierdas".

Anguita señaló que esa confrontación "entre teoría y práctica" ha terminado por generar un proceso de disgreación que conducirá a un debate interno para intentar restañar las grietas que, a su juicio, ya pudieron apreciarse claramente en el ultimo Congreso del PSOE.

Para el líder de IU, el modelo de relaciones entre Gobierno y partido que adoptaría su formación política si llegase al poder es "facilísimo: un partido ejerce el Gobierno a través de unos señores que han sido elegidos por el pueblo y tiene que haber una coordinación, sabiendo que el Ejecutivo tiene su esfera de autonomía".

Por su parte, ellíder del Partido de los Trabajadores de España, Santiago Carrillo, declaró que las causas últimas en el enfrentamiento entre el Gobierno y el PSOE es que existen divergencias políticas "que comienzan a manifestarse ahora".

En su opinión, "la diferencia fundamental es que Solchaga representa la corriente liberal, de derecha, mientras que Alfonso Guerra y José María Benegas representan una corriente de tipo socialdemócrata más inclinada a la izquierda".

Carrillo señaló que este enfrentamiento "no ignifica que el Partido Socialista vaya a romperse, pero sí que de aquí en adelante, las diferencias en el PSOE serán cada vez más claras".

El ex secretario general del PCE no quiso comentar las razones de la ausencia de destacados dirigentes del PSOE en la manifestación del Primero de Mayo. "En otros tiempos la había -indicó-, se ve que los problemas que tienen con UGT a lo mejor dificultan su presencia".