A pesar de que en este mes de julio, el crédito total concedido por la banca creció en 520.222 millones de pesetas, el saldo final, 27,2 bilones de pesetas, es similar al que existía en noviembre de 1992, mes en el que se frenó el aumentó en la concesión de créditos por efecto de la creciente morosidad.

Sin embargo, aunque en 1993 se llegó a alcanzar de nevo un nivel similar al de 1992, especialmente en el mes de julio, desde enero de 1994, el crédito se había mantenido por debajo de los 27 billones de pesetas.

Por su parte, las cuentas corrientes a la vista aumentaron su saldo un 5,31 por cien en el mes de julio, frente a crecimientos más moderados en los primeros meses del año, lo que da idea de que los inversores han preferido mantenerse en liquidez a la vista de las turbulencias que han registrado en los últimos meses los mercados a medio y largo lazo.