Según datos del Boletín de Estadísticas Laborales del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, la mayoría de esos expedientes dieron lugar a la extinción de los contratos.

En concreto, 22.894 trabajadores fueron despedidos, un 4,8% menos que un año antes, mientras que a 23.563 se les suspendió el contrato, un 26,4% más, y a 716 se les redujo la jornada laboral, un 58,4% superior.

La mayoría de los trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo habían pactado previamente sus condiciones con el empresario. Así, hubo 38.928 trabajadores implicados en ERE pactados, frente a 8.245 que fueron resueltos por la autoridad laboral sin el acuerdo previo de las partes, con incrementos del 7,68% y el 17,78%, respectivamente.

Aunque ha habido más trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo, las empresas presentaron menos número de ERE que un año antes. En concreto, a los responsables de Trabajo les llegaron 2.650 ERE entre enero y septiembre de 2005, frente a 3.309 de un año antes, un 19,9% menos.

El sector más afectado por estas medidas colectivas de reducción de actividad es el industrial, con 30.067 empleados implicados, según datos correspondientes, en este caso, al mes de agosto. La cifra supone un alza del 19,9%.

También sube la incidencia de los expedientes de regulación de empleo en el sector agrario, con 3.855 trabajadores afectados, más del doble que entre enero y agosto de 2004, cuando la cifra se situó en 1.743.

Por el contrario, se reduce el número tanto en la construcción como en el sector servicios. En este último caso ha habido 8.576 trabajadores implicados en ERE, un 26,74% menos, mientras que en el de la construcción los expedientes alcanzaron a 784 empleados, un 8,73% inferior.