Los rechazos de donantes crecieron el año pasado casi un 5 por ciento, pasando del 13 por ciento de 1992 al 18,66 por ciento en 1993. La federación afirma que esta circunstancia se debe a las "exigencias técnico-sanitarias cada vez más rígidas que, sin duda, propician una mayor calidad en la sangre donada y simultáneamente una mejor gatantía del donante".

De las 206.318 personas que efectuaron su primera donación en 1993, el 80 por ciento son jóvenes de entre 18 y 23 años, detectándose "un crecimiento espectacular en este segmento de la población, con especial incidencia en estudiantes universitarios".

La federación asegur que España ha conseguido autoabastecerse en sangre completa, aunque sigue siendo deficitaria en plasma. "Nuestro país consume al año 400.000 litros de plasma y sólo se han obtenido al fraccionar parte de la sangre completa o por donación directa de plasma (plasmaféresis) 100.000 litros".

Actualmente, la sanidad española importa al año 300.000 litros de derivados plasmáticos (albúmina, factores de coagulación VIII y IX, inmunoglobulinas polivalentes y específicas, etc), que requieren para su obtenciónuna tecnología especial que no existe en nuestro país.

La Federación Nacional de Donantes de Sangre, que agrupa a 80 hermandades distribuidas por todo el Estado, reclama un mayor reconocimiento social para los donantes, ya que 75 de cada 100 personans necesitan sangre alguna vez en su vida y sólo 3 de cada 100 españoles realizan donaciones.

Entre los proyectos que estudia la federación durante este año, destaca la constitución de la Fundación para la Donación de Sangre y Plasma en España, que iniiará su actividad en el próximo mes de mayo.