Respecto al número total de operaciones de constitución de créditos hipotecarios, en el conjunto del año se registraron un total de 1.158.020, con un crecimiento del 8,7%, lo que situó el saldo vivo de los créditos en los 709.679 millones de euros.

Por su parte, el importe medio de los créditos solicitados por los compradores de vivienda llegó a los 124.589 euros, siendo el plazo medio de vigencia del mismo de 25 años.

Además, en el 99,4% de los casos los clientes se decantaron por contratar operaciones con un tipo de interés variable, bien ligado al Euribor o al IRPH de las Cajas de Ahorros. El resto (un 0,6%) prefirió contratar su hipoteca con un tipo de interés fijo, normalmente más alto pero no expuesto a las subidas de los tipos.

Ello hizo que el esfuerzo de endeudamiento de las familias españolas para adquirir una primera vivienda alcanzase en 2005 el 35% de sus ingresos medios.