De acuerdo con estos datos, que proceden de las declaraciones de la Renta presentadas en 2004, correspondientes al ejercicio fiscal 2003, cada uno de estos contribuyentes renunció a que Hacienda le devolviera una media de cerca de 26 euros.

Aunque Hacienda desconoce las razones por las que estos contribuyentes renunciaron a su devolución, todo parece indicar que en la mayoría de los casos se debió a que las cantidades a devolver eran muy pequeñas.

También puede ocurrir que el contribuyente no disponga de una cuenta bancaria donde ingresar la devolución, como puede ser el caso de menores que hayan tenido algún rendimiento de capital, pero que no dispongan de cuenta bancaria; o que el contribuyente esté desplazado.

Además, en la Campaña de Renta del pasado año hubo 89.000 declaraciones negativas y otras, entre las que se incluyen las que resultaron cuota cero (cuando la retención está totalmente ajustada), y las que aritméticamente salen a devolver, pero que no han tenido ninguna retención ni ingreso a cuenta, por lo que no hay nada que devolver.

Las fuentes de la Agencia Tributaria consultadas recordaron que las devoluciones en la declaración son devoluciones de algo que se ha retenido de más, "pero si no se ha retenido nada al contribuyente, no hay nada que devolver".