Los concentrados en respuesta a la convocatoria d los empleados de Alditrans eran alrededor de dos mil personas, que permanecieron en silencio durante un cuarto de hora, junto con los hijos de Aldaya.

Enfrente, como viene siendo habitual, se manifestó un grupo de unas cien contramanifestantes, separados por un fuerte dispositivo de la Ertzaintza, que no actuó contra ellos, a pesar de que la contramanifestación no estaba autorizada.

Uno de los contramanifestantes, que se hizo oir con un megáfono, leyó en euskera, mientras los concentrados se encntraban en sus quince minutos de silencio, el comunicado difundido por la banda terrorista ETA el 14 de abril del año pasado, en el que aboga por la autoderminación del País Vasco y la unificación de éste con Navarra y el País Vasco francés. Los contramanifestes corearon gritos como "Atutxa, fascista, el próximo en la lista", y dieron voces a favor de ETA militar.