De acuerdo con el cálculo hecho por los colectivos de consumidores, el Gobierno debería recortar en enero de 2002 un 5% el recibo de la luz a los usuarios domésticos en cumplimiento de sus pomesas.

Rato desveló la pasada semana que Economía estudia un método para determinar las tarifas que no dependa sólo de la inflación, sino también de la coyuntura de las eléctricas y la necesidad de invertir con rentabilidad. También garantizó al sector reglas claras de juego.

La Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (CEACCU) cree "que el Gobierno debe seguir haciendo frente al compromiso que tenía de la bajada del 9%".

La organización no considera"admisible que, sin que exista una competencia real y efectiva, y con unos beneficios de las empresas tan elevadísimos, que dentro de sus valoraciones se dé a entender que se puede limitar la calidad en el servicio de suministro, única y exclusivamente, a un incremento de las tarifas", señaló a Servimedia Fernando López Romano, portavoz de la CEACCU.

Por su parte, la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) afirmó que es "muy negativo que el Gobierno se pliegue prácticamente a las condiciones d las operadoras".

"Se nos prometió que la liberalización iba a ser el paraíso terrenal y la verdad es que no está siendo nada de nada", manifestó a Servimedia el portavoz de la CECU, Antonio López.