Méndez Pozo, condenado a 7 años de cárcel por falsedad en documento público y prevaricación en el llamado "juico de la construcción", se presentó en el citado centro penitenciario por su propia voluntad para evitar la presencia de la policía en su domicilio.

La providencia dictada por la Audiencia Provincial burgalesa, firmada por el magistrado que presidió el tribunal en el "juicio de la construcción", Juan Sancho, ha sido consecuencia directa del rechazo del Tribunal Constitucional al recurso de amparo solicitado por el constructor.

El director de la cárcel burgalesa, Feliciano Grelgo, ha afirmado que Mndez Pozo será tratado "como cualquier otro recluso". El constructor burgalés fue el único de los encausados en el "juicio de la construcción" que fue condenado a pena privativa de libertad.