Este descenso se debió a la fuerte caía que registró la vivienda privada, del 11,2 por ciento, al iniciarse sólo 39.890 viviendas de este tipo entre enero y marzo de este año, frente a las 44.915 de los mismos meses de 1992.

La construcción de vivienda pública, que tiene un peso muy inferior a la privada, aumentó, sin embargo, un 67,6 por ciento, pasando de iniciarse 713 viviendas de este tipo en los tres primeros meses del año pasado a 1.195 en el mismo período de este año.

Por lo que se refiere a las viviendas terminadas en el primr semestre del año, también descendieron con respecto a los mismos meses de 1992, un 12,1 por ciento, al terminarse sólo 48.733 viviendas, 6.681 menos que el año pasado.

Del total de viviendas terminadas en el primer trimestre, 47.350 eran privadas, frente a las 53.502 del año pasado, y sólo 1.383 públicas (1.912 en el primer trimestre de 1992), lo que supuso un descenso del 11,5 y 27,7 por ciento, respectivamente.

En el período enero-marzo de este año había un total de 735.800 viviendas en constucción, entre protegidas y libres, 8.500 viviendas menos que en los mismos meses de 1992 (-1,1 por ciento) y 68.900 menos que en 1991 (-8,5 por ciento).

Respecto al consumo de cemento, los últimos datos de Seopán indican que disminuyó un 13,8 por ciento en el primer semestre del año, al utilizarse un total de 11.575.100 toneladas de cemento en ese período, frente a las 13.420.700 toneladas de los primeros seis meses del año pasado.