"A Aznar se le han subido a las barbas sus socios nacionalistas y hoy asistimos con mucha preocupación a una ruptura de los consensos básicos que permitieron encauzar el problema territorial de España", dijo Borrell antes de entrar en la recepción oficial del Día de la Constitución celebrada en el Congreso.

"No estamos dispuestos a que se celebre el XX aniversario de la Constitución con tropelías parlamentarias que vacían radicalmente de contenido la forma de hacer las leye, hurtando al debate cuestiones de enorme importancia para la gente", advirtió Borrell.

Por este motivo, apostó por apelar al espíritu y la letra de la Carta Magna, que ha permitido "avanzar en el perfeccionamiento de sus mecanismos y en una riqueza mayor de la vida política".