En este sentido, destacó la necesidad de eliminar y reducir las causas de la exclusión social y la marginación, raíces, a su juicio, "de muchos de los problemas en los que el delito encuentra fácil acomodo".

Méndez hizo estas declaraciones durante su discurso con motivo de la festividad de la Guardia Civil, en el que aseguró que los programas propuestos en el "Plan Estratégico de Seguridad Ciudadana" presentado hace un año están produciendo"resultados claros en el retroceso de la criminalidad y en la consecución de un mejor clima de seguridad en Madrid", que es la prioridad del Gobierno.

Indicó que el terrorismo sigue siendo la principal amenaza, a la que dijo que se vence "desde la firmeza inquebrantable de las instituciones, a través de la aplicación de nuestras leyes y de la acción de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado". Méndez insistió en que es una lucha en la que "todos los demócratas tenemos que estar unidos, proque la unidad nos hace fuertes frente a la amenaza".

También se refirió a la lucha contra el delito organizado, que, aseguró, adopta formas cambiantes cada vez más sofisticadas y complejas, lo que exige modernizar medios y métodos de trabajo; y a la necesidad de luchar "de forma vigorosa" contra las redes de explotación de personas (inmigrantes, mujeres y niños), porque "son delitos que repugnan a nuestras conciencias".

El delegado del Gobierno puso especial énfasis en la erradicación de las bandas y grupos juveniles violentos, prioridad absoluta de la Guardia Civil, según explicó, así como en la eliminación de otros comportamientos violentos, como los producidos frente a las mujeres.

Durante su discurso, Méndez destacó la apuesta decidida del Gobierno central por el fortalecimiento de la Guardia Civil, que, en su opinión, cumple un papel decisivo y goza del respeto y afecto de la sociedad porque es una pieza básica en las nuevas políticas de seguridad.