"A pesar de todas las vrsiones y concesiones, el Gobierno de Aznar no ha conseguido evitar que hoy el desorden territorial sea una preocupación importante para nuestro futuro político", dijo Borrell en rueda de prensa.

Asimismo, el Consejo Territorial ratificó en todo su contenido el documento que sobre la Estructura del Estado aprobó por unanimidad el Comité Federal del PSOE el pasado 21 de marzo. En ese documento se plasma una política autonómica que propone al país una orientación hacia el federalismo político, que combie la aceptación de la diversidad y la garantía de la cohesión sobre un sistema de autonomismo constitucional.

Durante la presentación de este acuerdo, el candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, José Borrell, explicó que el debate territorial está sobre la mesa de una forma insistente y seguirá siendo uno de los temas centrales de los próximos meses en la agenda política, por lo que ha tenido "especial interés" en que su partido "debata esta problemática que es vital para la construcción decualquier proyecto político", afirmó.

En opinión del PSOE, de ese debate en el Senado deberían de surgir foros donde desarrollar un diálogo interpartidario, "ya sea en sede parlamentaria o auspiciados por el Gobierno, para buscar soluciones a los temas que hoy vertebran el problema territorial y la agenda autonómica de España".

LA AGENDA

Para el Partido Socialista, esa agenda autonómica debe configurarse con arreglo a las siguientes cuestiones: La culminación del desarrollo autonómico y la estailización del modelo; la negociación de un nuevo modelo de financiación para las comunidades autónomas, por considerar que el actual modelo ha fracasado; la reforma del Senado para convertirlo en una Cámara territorial, lo que supondrá una reforma constitucional; mayor y mejor participación de las comunidades autónomas en el conjunto de comités, consejos y órganos de gobierno de la Unión Europea, y reformar en profundidad el mundo local.

El documento aprobado por el Consejo Territorial señala que, sinexcluir una consideración dinámica de la Constitución y de los Estatutos de autonomía, "conviene establecer un acuerdo de estabilidad del modelo que proporcione seguridad jurídica y orden político y asiente en los próximos años el reparto territorial del poder".

Asimismo, propone estudiar la redefinición de los servicios públicos centrales, transferidos parcial o totalmente, "a fin de garantizar la cooperación, la cohesión y la igualdad de derechos de todos los españoles".

Borrell agregó que eso xige también abordar la definición, el respeto y la protección de los hechos diferenciales y derechos históricos que caracterizan a algunas comunidades autónomas y su compatibilidad con los principios constitucionales que aseguran la igualdad de todos los ciudadanos, tal como establece el artículo 138 de la Constitución.

CONSENSO

En cuanto a la financiación autonómica, Borrell señaló que "no sería bueno que el sistema de financiación autonómica se tuviese que negociar en los próximos días del siguiete gobierno, momentos especialmente difíciles", recordó, "para buscar soluciones que no sean coyunturales a un gran problema estructural". Por ello, los socialistas piden que se cree una mesa de trabajo en la actual Comisión General de Autonomías del Senado, donde todos los partidos que gobiernan en comunidades autónomas pongan en común sus puntos de vista para buscar una solución consensuada.

El Consejo Territorial del PSOE también considera necesario fortalecer el poder municipal, mediante el traspao de competencias susceptibles de ser asumidas por ellos. En este contexto del fortalecimiento del poder local, Borrell anunció que el Grupo Parlamentario Socialista presentará una proposición de ley para la elección directa de los alcaldes.

A modo de resumen del documento, Borrell manifestó que los socialistas quieren avanzar "en la construcción de una España que desarrolle los principios del autonomismo constitucional hacia el federalismo político que recoja las diversidades y garantice la cohesión el país"

Preguntado si han tenido dificultades para llegar a este documento común, para aunar las voces que hasta hace unas semanas parecían diferentes, Borrell manifestó que el debate "ha sido largo, intenso. Es evidente", agregó, "que el Partido Socialista no funciona, afortunadamente, a toque de trompeta".

Tras señalar que "no se ve igual a España desde una parte de España que desde otra parte de España", afirmó que el debate "nos ha permitido concluir que lo que dijimos en marzo sigue siendo lenamente válido y que la iniciativa que intentan tomar los partidos nacionalistas no debe guiar nuestra acción".

Sobre sí mismo afirmó que se siente catalán, español y europeo. "No veo ninguna contradicción en ninguna de las tres cosas, porque puedo perfectamente ser las tres a la vez". En este sentido, afirmó que "defiende la idea política de la España constitucional, no de la Cruzada de 1936 o de cuando fuere. Don Pelayo hace tiempo que no vota".