Para el consejo, estas declaraciones muestran una vez más la "indiferencia de la comunidad internacional y unadejación de su responsabilidad por parte de la ONU ante la situación en la que vive el pueblo saharaui desde hace 30 años, volviendo la cara hacia el otro lado ante la represión en los territorios ocupados y las lamentablescondiciones de vida que soportan en los campamentos derefugiados".

El CJE cree que es obligación de la ONU garantizar el respeto de los derechos humanos, de las libertades y elcumplimiento de la legalidad internacional en el territoriodel Sáhara Occidental, ya que ambos principios sonfundamentales para el desbloqueo de las conversaciones entre las partes.

El consejo hace un llamamiento al Gobierno español para que asuma la responsabilidad histórica que le corresponde y exija a Naciones Unidas el cumplimiento de las resolucionesque permitan un futuro digno, pacífico y próspero para el pueblo saharaui.