Durante la reunión, que ha tenido lugar en la Consejería de Vivienda, se informó a los vecinos de Orcasitas de que la única alternativa para solucionar su caso pasa por que soliciten las ayudas del Gobierno regional y del Estado, según informó la Consejería en un comunicado.

El Ivima vendió hace 20 años 2.264 de las 2.276 viviendas del barrio, por lo que legalmente sólo puede asumir el coste de la reparación de los 12 pisos aún de su propiedad, aclara la Consejería.

El director gerente del Ivima, José Antonio Martínez Páramo, explicó que "afrontar este gasto supondría incurrir en una irregularidad ya que no podemos destinar 2,2 millones de euros de los fondos públicos al arreglo de instalaciones que, según la ley, son privadas".

En todos los contratos de compraventa de las viviendas de Orcasitas, y según la Circular de 9 de junio de 1982 de la Dirección Provincial de Obras Públicas y Urbanismo, aparece incluida la siguiente cláusula: "Entre los elementos comunes de las viviendas y locales, existe una central térmica, en cuya propiedad participa el beneficiario de este contrato, debiendo proceder a sufragar los gastos de la misma en la parte alícuota que le corresponda".

Las viviendas en cuestión fueron vendidas a sus inquilinos en el periodo de 1985 a 1996, por lo que sus propietarios están sujetos a la legislación vigente.

Según aparece en el artículo 168 de la Ley 9/2001, de 17 de julio, de Suelo de la Comunidad de Madrid, son los propietarios de los terrenos, construcciones y edificaciones quienes deben mantenerlos en condiciones de seguridad, salubridad, ornato público y decoro, realizando los trabajos y obras precisas para conservarlos o rehabilitarlos, a fin, de mantener en todo momento las condiciones requeridas para la habitabilidad o el uso efectivo.