Javier Barrero, del Grupo Socialista, resaltó que es necesario promover en la Cámara Baja un debate para "evitar las malas consecuencias de la clandestinidad y arbitrariedad en algo tan importante como la posibilidad de una muerte digna".

Explicó que este tema, "relativamente reciente en España", no lo es en otros países europeos, donde ya se ha legislado al respecto o se está trabajando e ello, y resaltó que en el Senado, donde ya se discutió este tema, no se extrajo ningún informe de conclusiones, por lo que insistió en la conveniencia de continuar este debate en el Congreso.

Asimismo, añadió que esta subcomisión tendría también como objetivo debatir los "aspectos colaterales" de esta cuestión, como los cuidados paliativos, a fin de crear más equipos en los hospitales y de asistencia domiciliaria, mejorar la formación en esta rama de la medicina y, en definitiva, garantizar su cobertra a todos aquellos enfermos que necesiten este tipo de ayuda médica.

El diputado del Grupo Mixto Joan Saura y la portavoz del PNV en esta Comisión, Margarita Uría, se mostraron conformes con esta propuesta y resaltaron que la comisión creada en el Senado sobre esta materia supuso una oportunidad perdida, porque tras más de año y medio de trabajo y un buen número de ponencias, no sólo de médicos, sino también juristas, no se extrajeron conclusiones.

Saura indicó que se trata "simplemente de escucar opiniones distintas sobre este tema que atañe a consideraciones éticas, abrir un debate sosegado en un marco donde nos podamos escuchar". Para Uría, "el Congreso es el lugar adecuado para abordar este tema en el seno de una subcomisión".

CUIDADOS PALIATIVOS

De un modo distinto se manifestaron los portavoces del Grupo Popular, CiU y CC. Andrés Ollero, en nombre del PP, argumentó que "da la sensación de que este tema es inédito, cuando pocas cuestiones se han debatido más en las Cámaras que ésta". Añadió que "es difícil acostumbrarse a un problema tan profundo como el que este tipo de debates suscita", que implica discutir sobre un "trance desisivo" en la vida de una persona, y recalcó que la dignidad de una solución como la eutanasia "depende de lo que se pueda entender por digno", por lo que recomendó no tomar cuestiones que afectan al derecho "con demasiada alegría".

Por su parte, Manel Silva, del Grupo Catalán, apuntó que este tema debería continuar debatiéndose en el Senado, no abrir u nuevo foro desde el principio, y recalcó que, en cualquier caso, "el debate no debe ser eutanasia activa sí o no, sino que debería versar sobre la ética, y marcarse como objetivo garantizar a nuestras personas mayores la mayor y mejor calidad de vida".

En este sentido, indicó que es más importante ampliar la cobertura de los cuidados paliativos y evitar que, como ocurre en Holanda, un 20 por ciento de las personas que se someten a eutanasia activa lo hacen sin conocimiento y consentimiento.

LuisMardones, de Coalición Canaria, subrayó que, antes de empezar a discutir en el Congreso este tema, es necesario crear "una conciencia social que permita legislación al respecto", porque "actualmente no hay disposición ni de ideas ni de creencias ni de estudios para abordar cuestión de fondo, y tratar cuestiones de forma es abrir un debate estéril".