La llegada de Cascos al Palacio Municipal de Congresos de Madrid estuvo rodeada de una fuerte espectación, por ser el autor de la única enmienda que propone ncluir en los estatutos la limitación de mandatos y, en todo caso, dejar en manos de los congresos la decisión sobre la presentación de los candidatos a un tercer mandato, lo que afectaría al presidente José María Aznar.

Según dijo, el 50 por ciento del éxito del Congreso depende del talante democrático con que se desarrolle y es independiente de su resultado final. Por tanto, consideró que este XIV Congreso debe se "fiel reflejo del profundo espíritu democrático de un partido".

Recordó que el PPha trabajado muchos años para dotarse de "garantías democráticas" hasta llegar a ser "el partido más impecablemente democrático, transparente y abierto de la sociedad española".

Cascos no quiso pronunciarse sobre las posibilidades que tiene su enmienda de pasar a debate en el pleno consiguiendo el 30 por ciento de los votos de la comisión de Estatutos que debatirá esta noche el texto.

"Yo no he hecho pronósticos", dijo, "no he hecho quinielas, ni siquiera he hecho campaña. No encontrará en este Cngreso a ningún compromisario que le diga que Alvarez Cascos le ha llamado para pedirle que le apoye en un sentido o en otro. Todos los compromisarios saben lo que tienen que hacer en conciencia y los demás, empezando por mí, vamos a aceptar el resultado sea el que sea".

Dicho esto, Cascos insistió en que aborda el debate de su emienda con "ánimo negociador" y no descartó que se pudiera acordar en el curso del día de hoy un texto transaccional que permita llegar a un consenso sobre su propuesta.

Un debate de estas características significa tener disposición para transaccionar", añadió, "pero ya se sabe que estas son cosas de dos y por lo tanto continuaremos las conversaciones, las negociaciones, las discusiones en la comisión y finalmente los compromisarios tomarán su decisión".

En todo caso, el ex secretario general insistió en que mantiene sus propias convicciones sobre el modelo de partido e insistió en que la enmienda que pretende dejar en manos del Congreso la decisión de Aznar de presenarse a una tercera reelección, "no tiene tanta trascendencia" como parece deducirse de su tratamiento en los medios de comunicación.

En todo caso, desvinculó su futuro político del destino que corra su enmienda. "Mi presente es independiente del resultado de la votación de hoy. Mi futuro político dura 24 horas y, por lo tanto, lo que más me interesa es que salga reforzado el futuro político de este partido, que está asegurado por las raices democráticas que caracterizan su comportamiento".

Sobre a supuesta reunión que ayer podría haber mantenido Cascos con el presidente del Gobierno, José María Aznar, no desveló ningún detalle, ni siquiera confirmó que la citada reunión se hubiera producido. "No hago ningún comentario y todo el mundo sabe donde estuve ayer", dijo con intención de remarcar que estuvo en León asistiendo a varias reuniones relacionadas con su responsabilidad de ministro de Fomento.