CONGRESO PCE. RAFAEL RIO ARREMETE CONTRA LAS "INJERENCIAS" DEL PCE EN EL PSUC Y SE DESMARCA DE LAS CRITICAS A CCOO
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El presidente de Iniciativa per Catalunya (IC) y secretario general del PSUC, Rafael Ribó, arremetió hoy en el plenario del congreso del PCE contra la dirección comunista que lidera Julio Anguita, por sus "injerencias" en el PSUC durante las últimas semanas.
Ribó aseguró que la mayoría del PSUC se siente "muy dolida" por la actitud del PCE, porque éste partido, con sus movimienos de las últimas semanas para revitalizar el PSUC, no ha dado muestras del "respeto mutuo" a la autonomía de las dos formaciones que siempre ha defendido el PSUC.
El presidente de IC acusó a la dirección del PCE de haber incumplido claramente el compromiso alcanzado el pasado verano entre las direcciones de los partidos, en las que se dejó claro que el PCE no se entrometería en el proceso precongresual del PSUC, y viceversa.
Citó expresamente la reunión a la que asistió Anguita, cuatro días despés de las elecciones catalanas, con el sector crítico del PSUC, opuesto a la mayoría que lidera Ribó, en un intento de sacar a los comunistas catalanes de su estado actual, que consideran de "hibernación".
En su discurso de hoy, Ribó subrayó que la "inmensa mayoría" del PSUC está claramente por una concepción de Iniciativa per Catalunya "no como un mero frente electoral sino como una apuesta estratégica de trabajo", en la que se ha querido que el PSUC tenga un papel de suma y no de hegemonía.
En u opinión, avalan esta apuesta los últimos resultados electorales cosechados por Iniciativa per Catalunya y el recuerdo todavía presente del descalabro que sufrió el PSUC en 1986, antes de que se creara Iniciativa.
En respuesta al discurso de la mañana de Julio Anguita, el presidente de IC aseguró que él no tiene ninguna voluntad de "hegemonizar" nada ni dentro de Iniciativa per Catalunya ni en el seno de la izquierda. Su objetivo, dijo, es "sumar y aunar" voluntades entre los distintos colectivos de a izquierda española, incluido el PSOE, sin olvidar nunca la contribución que ha tenido el PSUC al advenimiento de la democracia a España.
OPOSICION A ANGUITA
Durante su intervención, Rafael Ribó puso de manifiesto una visión estratégica de lo que debe ser Izquierda Unida y sus relaciones políticas notablemente confrontada con Julio Anguita.
Al margen de las serias discrepancias sobre el PSUC, Ribó evidenció un análisis totalmente opuesto respecto a las relaciones con los sindicatos, sobre todocon Comisiones Obreras.
En este punto, hizo una encendida defensa de la gestión de Antonio Gutiérrez, subrayó el crecimiento de este sindicato en los últimos años y, por encima de todo, defendió la necesidad de respetar la "independencia" de CCOO, en contraposición con el afán de muchos dirigentes comunistas de influir en este sindicato.
Prueba de las buenas relaciones entre IC y la dirección actual de CCOO es la mención expresa que hizo en posterior rueda de prensa al apoyo que prestó Antonio Guiérrez a su formación durante las últimas elecciones catalanas.
Sobre las relaciones con el PSOE, además de insistir en que le gustaría que Izquierda Unida y los socialistas colaboraran juntos y no estuvieran enfrentados en un futuro próximo, se desmarcó también de la teoría de Anguita sobre las "dos orillas" y la misma derecha PSOE-PP y señaló: "Yo no voy a condenar a nadie al averno de la derecha".
Una muestra de las malas relaciones de la mayoría del PSUC con la dirección del PCE es que Ribó aujo razones personales para abandonar hoy mismo el cónclave comunista y no asistir a las dos jornadas restantes.
Durante la sesión plenaria de esta tarde, Ribó tuvo que escuchar duras críticas de algunos portavoces de delegación, como la vasca, que definió al PSUC actual como un "cadáver político". El representante canario afirmó que la sociedad catalana no podía sentirse "orgullosa" de los últimos años del PSUC, mientras el murciano rechazó el estado actual de "hibernación" de los comunistas catalane.
(SERVIMEDIA)
08 Dic 1995
JRN