La diputada del PSOE Elvira Cortajerena, que defendió la propuesta de su grupo, recordó datos contenidos en el manifiesto, como los más de 17 millones de parados en Europa, 53 millons de personas por debajo del umbral de la pobreza y más de 5 millones de personas mal alojadas.

Según Cortajerena, estas cifras bastán para resaltar la amplitud de la exclusión social y la pobreza que existe en la Unión Europea.

Afirmó que si bien no todos los parados son excluidos, sí todos los excluidos son parados, y añadió que son importantes las medidas que permitan sensibilizar al mundo empresarial con esta realidad, favoreciendo las actuaciones que estimulen una mayor implicación de las emresas en la lucha contra la pobreza.

La diputada del PSOE recordó las acciones que quieren iniciar las empresas para una acción global contra la exclusión y que están recogidas en el manifiesto: favorecer la integración en el mercado de trabajo, colaborar en la mejora de la formación profesional, evitar la exclusión en las empresas y prevenir los despidos y promover trabajo para las personas excluídas.

En su opinión, para prevenir la exclusión social y luchar contra ella hay que contar con el esferzo de los afectados, las instituciones nacionales, regionales y locales, las asociaciones de solidaridad, las ONG's, los interlocutores sociales y las empresas.

BIEN RECIBIDAS

Por su parte, la diputada de CiU María Mercé Amorós justificó el apoyo de su partido a la proposición no de ley, y dijo que todas las iniciativas encaminadas a paliar cualquier tipo de exclusión social serán bien recibidas por su grupo parlamentario.

Por IU, el parlamentario Pedro Vaquero indicó que esta propuesta cambi el concepto empresarial de crear empleo por criterios de competitividad por el de "humanización".

Finalmente, el diputado del PP Damián Caneda señaló que corresponde a las empresas analizar por qué se produce la exclusión social y por qué una parte de la población no encuentra el camino adecuado para la integración laboral.