Gracias a este decreto, esas personas podrán acceder a la pensión de viudedad acreditando haber convivido con una persona fallecida por acto terrorista, que esa convivencia constituía una relación afectiva análoga a la del matrimonio, y que se produjo de forma permanente durante, al menos, los dos años anteriores al fallecimiento.

El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, explicó desde la tribuna que este decreto pretende "salvar la desigualdad" que se estaba dando entre las parejas de las víctimas del terrorismo.

Recordó que fue el Alto Comisionado de atención a las víctimas del terrorismo el que alertó de la existencia de varias personas, parejas de hecho de víctimas de actos terroristas que, por no estar unidas a ellas en matrimonio, no tenían derecho a la pensión.

El ministro subrayó que existe el antecedente de un real decreto aprobado tras la muerte de los militares españoles en el accidente del Yakovlev 42, que también aprobó la concesión de pensiones a las parejas de hecho de los fallecidos.

Se trata, según Pérez Rubalcaba, de "un acto más de reconocimiento" del Congreso, en nombre de toda la sociedad española, a quienes han sufrido el terrorismo.

Es también, subrayó, una muestra palpable de que las víctimas estarán siempre en la memoria del Gobierno y de todos los ciudadanos.

Todos los portavoces intervinieron para respaldar expresamente el contenido de este decreto, por entender que elimina una discriminación.

La portavoz del PP, Ana Torme, pidió al Gobierno "que no regatee" esfuerzos en la ayuda a las víctimas del terrorismo, y que sus palabras sobre la necesidad de unidad y de memoria "no sean mera retórica".

El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, respaldó el decreto pero discrepó de que sean necesarios dos años de convivencia, porque ello supone una clara diferencia respecto de quienes estuvieran unidos por vínculo conyugal.

Emplazó por ello al Gobierno a regular con mayor precisión las parejas de hecho para equipararlas completamente a los matrimonios, y también a presentar la prometida ley integral de atención a las víctimas del terrorismo.

Este decreto se debatió en el Pleno del Congreso en medio de una gran expectación, mientras en pasillos se aguardaba al comienzo de las reuniones convocadas por el ministro de Interior con los portavoces parlamentarios como paso previo al anuncio del presidente del Gobierno sobre el inicio de los contactos con ETA.

Esas reuniones deberían haber comenzado a las diez con el portavoz del PP, Eduardo Zaplana, pero a esa hora el ministro defendía desde la tribuna el decreto, y después asistía desde su escaño al desarrollo del debate, por lo que la ronda de reuniones se retrasó hasta después del debate.

Debido a la votación de iniciativas en bloques, cuando se votó el decreto sobre víctimas del terrorismo ya se sabía que el presidente del Gobierno comparecería después ante la prensa para anunciar el inicio del diálogo con ETA.