La proposición de ley aprobada este mediodía pretende que se aproveche el 75 aniversario de la Constitución de 1931 para reconocer que la II República fue el "primer régimen realmente democrático" de la historia de España y que aquella Carta Magna es el "antecedente" de la vigente.

El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares", explicó que la propuesta que se debate hoy "no es un prolegómeno de la Ley de la Memoria" en la que trabaja el Gobierno. "Es una iniciativa humilde que sólo pretende rememorar la República como antecedente democrático, y reconocer a los luchadores de este país".

"Lo que nos interesa en el 75 aniversario de la II República es hacer un homenaje de todos los demócratas" a las víctimas de un régimen ilegítimo. "No se trata de reabrir ninguna herida, lo que ocurre es que cuando se produce una catástrofe humana como fue la guerra civil que se prolonga en el tiempo con la represión, los pueblos tardan décadas en recuperarse".

En esa situación, se utiliza el "olvido" para tratar de sanar, pero al cabo del tiempo "se empieza a rememorar a través de los nietos de aquella época, quienes sin represión y sin la presión de la catástrofe" comienzan a hacer memoria y a buscar justicia, lo que significa que "aquéllos que se sacrificaron por la recuperación de la democracia sean recordados".

Avisó al PP de que "no es propietario de la transición democrática", y no puede "contraponer república a transición, porque los autores son los mismos". Defendió la legitimidad de la II República, el trabajo y la lucha de los republicanos antifranquistas por la recuperación de las libertades, y la reivindicación actual de la forma de Estado republicana.

Llamazares preguntó al partido mayoritario de la oposición "qué querencia hace que se vea hoy tan ofendido por la recuperación de la memoria", y subrayó que "la derecha política no debe sentirse heredera del franquismo, sino de lo mejor de la transición democrática".

"VERDAD LIBERADORA"

El portavoz del PSOE en la Comisión Constitucional, Ramón Jáuregui, aseguró que su partido "dice sí a que los españoles conmemoren la II República y rindan homenaje a las víctimas de la guerra civil y del franquismo", porque en contra de la "argumentación pobre, parcial, equivocada y peligrosa" del PP, la memoria histórica debe "iluminarnos", y no debe "taparse".

"No podemos correr un tupido velo, porque son acontecimientos clave en nuestras vidas. La verdad, que siempre es dura y escabrosa, que toca elementos conflictivos en cada uno de nosotros, es también liberadora", prosiguió, por lo que "no estamos dispuestos a que estos acontecimientos se diluyan en un mar proceloso, en una sociedad informada pero poco formada".

Agregó que "no estamos dispuestos a que nos manipulen la historia cuatro revisionistas de pacotilla", porque la II República fue "un emocionado intento de construir un país moderno, democrático, desde los anhelos de justicia y libertad", y recordarla es "reivindicar el compromiso con la libertad y la democracia".

Tras lamentar el veto del PP a una enmienda transaccional con la que el PSOE quería buscar el acuerdo de todos, se felicitó de que "vivimos en un país que ha dado la vuelta a esas páginas negras de nuestra historia, y hoy proclamamos orgullosos, bien alto, los valores de la razón y el espíritu republicanos".

"BOICOT" DEL PP

El diputado de ERC Agustí Cerdà reclamó una ley ambiciosa sobre memoria histórica, y advirtió al PSOE de que si sigue siendo "reo" de un PP que trata de "boicotear" estas iniciativas provocará el "desengaño yfrustración" de todos los que quieren un verdadero reconocimiento de la lucha antifranquista.

ERC se abstuvo porque no logró incluir ninguna de sus enmiendas, entre las que proponía unas jornadas de homenaje, la emisión en TVE de series documentales, la inclusión de contenidos pedagógicos en la enseñanza y una campaña institucional de difusión de la II República con material editorial y audiovisual accesible y en todas las lenguas del Estado.

En nombre de CiU, Carles Campuzano recalcó que "memoria no es sinónimo de venganza", sino de "reconocer las injusticias de la guerra civil y el franquismo y para no olvidar, porque el no olvido es la mejor garantía para nuestro progreso democrático".

Este grupo propició con una de sus enmiendas, que fue respaldada por el PSOE e IU-ICV, el emplazamiento al Gobierno a presentar, en un plazo de un mes desde que se publique la ley, que aún debe pasar por el Senado, el informe que elabora una comisión interministerial sobre la Ley de la Memoria comprometida por el jefe del Ejecutivo.

REABRIR HERIDAS

El diputado del PP Manuel Atencia justificó su rechazo en que ésta no es la línea en la que hay que actuar, porque "el revisionismo histórico que se intenta imponer divide e intenta reabrir heridas del pasado ya superadas ampliamente. La II República española es historia, y como tal debe ser tratada, porque es una etapa afortunadamente lejana".

"En cada etapa podemos hablar de cosas buenas y cosas no tan buenas, pero lo importante es que la Constitución de 1978 supera errores del pasado, actitudes que llevaron al enfrentamiento de los españoles y viejos conflictos", agregó, por lo que criticó lo que considera un intento de "resucitar el pasado como arma política".

Al PP, dijo, le gusta más "mirar hacia adelante y resolver problemas de los españoles que generar conflictos de interpretación", mientras que "la tendencia que se ha instalado de la mano de determinados grupos políticos sólo puede contribuir a tapar la ausencia de ideas".

Lamentó que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se considere "heredero de la II República" y no de la transición, y sentenció que no respaldará ninguna propuesta de recuperación de la memoria histórica porque considera que vulnera el Pacto Constitucional y trata de cambiar la historia.