Cristina Almeida criticó a las personas que defienden un modelo tradicional de familia en términos extremos que obligen a la mujer "a encrgarse únicamente de cumplir deberes sin recibir derechos".

Almeida cree que "la sociedad no se ha preocupado de hacer compatible para la mujer la maternidad y el desarrollo personal", al tiempo que considera que en la Conferencia de El Cairo "no se ha querido entrar en profundidad en el reconocimiento de la libertad de las mujeres para planificar el número de hijos que desean o que su derecho a abortar se recoja en el Derecho Internacional".

La abogada recalcó que algunos elementos de la tradicin islámica no reconocen la libertad a abortar, pero sí la libertad de decidir. "El Corán defiende que cada mujer tenga los hijos que pueda educar", manifestó, "lo que ya significa que está contenido en ese principio una libertad de elección".

Almeida señala que lograr un control de la población "es una capacidad de aportar desarrollo y bienestar al mundo", aunque rechazó que la mujer "reciba órdenes para no tener hijos, sea objeto de experimentaciones con anticonceptivos e incluso se viole su propia vluntad obligándola a la esterilización".

"No le tengo ningún respeto a las confesiones religiosas que quieren mantener la desiguladad entre hombres y mujeres", dijo Almeida "y menos cuando se polariza el aborto como un tema religioso y no como un tema de libertad de decisión individual".

Añadió que "las mujeres no aspiramos a abortar toda la vida, sino a que si alguna vez una mujer tiene que interrumpir su embarazo, no te lleven por ello a la cárcel".

Cristina Almeida valoró "positivamente" a III Conferencia sobre Población y Desarrollo, que se clausuró ayer en El Cairo, ya que, en su opinión, "llama a la atención y a la polémica" y "empuja a los países a dar su opinión en ámbitos internacionales más allá de la acción limitada de cada Estado".