CONFEMETAL PIDE QUE NO SE CONSIDEREN RESIDUOS LAS CHATARRAS METALICAS
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La Confederación Española de Organizaciones Empresariales del Metal (Confemetal) se ha mostrado contraria a la definición de residuo que está estableciendo el actual desarrollo normativomedioambiental, que iguala a las chatarras metálicas con cualquier otro material de deshecho.
Para Confemetal, esta definición es "absolutamente errónea", e influye en el tratamiento jurídico que las chatarras pueden recibir y en su aprovechamiento, que se verá dificultado por un excesivo intervencionismo administrativo. Ello, a su juicio, no contribuirá a mejorar el medio ambiente, sino que, por el contrario, puede redundar en un mayor consumo de recursos naturales en sectores como la siderurgia y lametalurgia.
La patronal de la industria del metal señala en un comunicado que es necesario definir claramente en el seno de la Unión Europea (UE) el concepto de chatarra en el marco de la reglamentación de los residuos, considerándola una materia prima secundaria y no un residuo.
En su opinión, esta consideración de la chatarra metálica, al ser los recursos naturales limitados y no renovables, sería la mejor forma de proteger el medio ambiente y prolongar la vida de las reservas naturales, sustityendo el uso de materias primas minerales por el de materias primas secundarias.
Según Confemetal, en las industrias metálicas, el valor económico intrínseco de las chatarras, en función del metal contenido, y la existencia de mercados bien establecidos, con agentes perfectamente identificados y precios de referencia conocidos, determinan la existencia de un circuito natural de valorización de estos productos.
La patronal explica que en España, en torno al 80% del acero producido procede de chataras, y en el caso de los metales no férreos, el 40% del consumo nacional de aluminio, el 40% del cobre, el 50% del plomo y el 10% del zinc utilizan como materia prima las chatarras de cada uno de los metales citados.
Desde un punto de vista medioambiental, la producción a partir de chatarras, según Confemetal, supone la gestión controlada en el mundo de cerca de 500 millones de toneladas al año de metales reciclados, lo que supone un ahorro energético del orden del 50% en el caso del acero, del 95% enel caso del aluminio, 70% para el cobre y el 60% para el plomo y zinc.
Por ello, Confemetal insiste en la necesidad de que se defina la chatarra a nivel europeo como materia prima secundaria, con lo que toda la industria comunitaria afectada tendría unas reglas de juego iguales. Además, esa homogeneización, a su juicio, evitaría incertidumbres y cargas innecesarias para la industria, que afectan a su eficacia y competitividad.
(SERVIMEDIA)
04 Nov 2000
NLV