Ignacio López, secretario general de la CEP, dijo a Servimedia que, a su juicio, este proyecto no es algo viable, aunque pueda ser planteado "con muy buenas intenciones".

Según López, la aplicación de esta idea se demostraría como un "fracaso", entre otras razones porque muchos países a los que podrían devolverse inmigrantes encarcelados no tienen condiciones equiparables en el terreno penitenciario y humanitario como las que hay en España.

Este representante de la CEP añadió que, además es muy probable que muchos de los reclusos extranjeros no aceptasen ser devueltos a sus países, ya que allí las cárceles tienen peores condiciones.

Asimismo, López remarcó que una parte de los presos de otros países entraron en España de forma ilegal, por lo que no encuentra "ningún motivo por el que ahora quieran abandonar tranquilamente el país".