Bajo el título "Factores de influencia en la gravedad del accidente corporal", el análisis realiza una radiografía de los accidentes de tráfico con daños corporales con el objetivo de reducir su número y de rebajar la gravedad producida a las víctimas.

Entre las conclusiones principales, se señala que la gravedad de los accidentes de tráfico que provocan los hombres con menos de un año de experiencia al volante es prácticamente el doble que la que provocan las conductoras noveles.

Del informe también se desprende que las mujeres, independientemente de su edad o experiencia en la conducción, producen accidentes mucho menos graves que los hombres (un 20% menos graves, como mínimo).

Por otro lado, en ambos sexos la gravedad media de los accidentes provocados se eleva en los tramos más altos de edad del conductor, sobre todo a partir de los 55 años.

COCHES NUEVOS Y POTENTES

Por lo tanto, el "llevar toda la vida conduciendo" no garantiza la seguridad en la carretera, sino que más bien al contrario: a medida que la edad del conductor es mayor, las capacidades personales normalmente van reduciéndose y las posibilidades de causar un accidente grave aumentan.

Asimismo, según el analisis, los accidentes provocados por turismos nuevos o casi nuevos (con menos de cuatro años de antigüedad) tienden a ser más graves, probablemente porque son vehículos más potentes y quienes los conducen, jóvenes en la mayoría de los casos, tienen patrones de conducción más veloces.

Además, según el análisis, la geografía es un factor importante a la hora de analizar la gravedad de los accidentes de tráfico. Los investigadores aseguran que este tipo de siniestros se producen fundamentalmente fuera de las capitales de provincia.

Por comunidades autónomas, Aragón, Galicia y Castilla-La Mancha son los territorios en los que la gravedad media de los accidentes con daños corporales es mayor, mientras que Melilla, Canarias y la Comunidad Valenciana, resultan las más seguras.

En cuanto a provincias, el análisis coloca a Lugo, Cuenca y a Orense como los territorios en los que la gravedad de los accidentes es mayor. Así, la primera de ellas registra un 57% de siniestralidad, una cifra muy por encima de la media nacional.

Por último, del análisis también se extrae que las entidades aseguradoras destinan cada año 3.500 millones de euros para atender a las víctimas de estos accidentes de tráfico.