Así lo establece la Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJ navarro, que, no obstante, reconoce que la víctima circulaba a una velocidad inadecuada.

Los hechos ponen de manifiesto que la señal de peligrosidad de la curva fue retirada durante unas obras y, una vez acabadas éstas, alguien olvidó volver a colocar la señal de tráfico.

El tribunal admite el recurso del accidentado si bien sólo admite un 20% de la suma total que había reclamado a la administración foral en concepto de indemnización, cifra que superaba los 18.000 euros.

Igualmente, señala en su escrito que "el accidente no se explica si no es por una velocidad inadecuada" por parte del conductor.