CONDENADO A 3,5 AÑOS DE CARCEL POR ROBAR CINCO DUROS Y UN RELOJ A UN MENOR

MADRID
SERVIMEDIA

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha condenado a Antonio Montoya Ramírez, de 20 años y con antecedentes penals, a tres años y medio de cárcel por robar cinco duros y un reloj de pulsera a un joven de 16 años, según una sentencia hecha pública hoy.

Los hechos se remontan al 3 de septiembre de 1997, cuando el condenado abordó a su víctima en la Gran Vía de Logroño cuando miraba un escaparate, lo agarró por el cuello y le pidió el dinero que llevaba encima.

El joven le entregó 25 pesetas, que era todo el dinero que llevaba encima. "Como esto le pareció poco al agresor", continua la sentencia, "le pidió más todo ello sin aflojar la presa hasta que el menor le hizo entrega de su reloj de pulsera, tras lo cual le soltó y permitió que continuara su camino".

El ladrón fue condenado por la Audiencia Provincial de Logroño a tres años y medio de prisión por un delito de robo con el agravante de reincidencia, sentencia ratificada ahora por el Supremo. Se da la circunstancia de que el agresor ya había sido castigado por cometer el mismo delito en otras dos ocasiones.

Tras recordar que el condenado reconocióen el juicio los hechos que se le imputaban, el Supremo añade que el hecho de que se recuperara el reloj y de que el agresor devolviese los cinco duros momentos antes de iniciarse el juicio no atenua la responsabilidad del condenado.

Según el Alto Tribunal, no basta con que la intimidación sobre la víctima fuese "mínima", que el valor del objeto fuese escaso y que el agresor no emplease arma alguna para robar al menor.

El Supremo argumenta que para atemorizar no es necesario "inmovilizar" ni ser invencible". En este sentido, añade que "basta con que las palabras o los hechos inspiren al receptor (víctima) un sentimiento de temor o angustia, ante la contingencia de un mal real o imaginario" en caso de no hacer lo que se le pide, máxime cuando el agresor es mayor que el asaltado.

(SERVIMEDIA)
21 Oct 1999
VBR