La Sección Tercera de la Audiencia Provincial considera probado que Conde Ingelmo acudió a la casa de su suegra, Natividad Arza, con la intención de robarle dinero para comprar droga. En el trancurso de una discusión que se produjo entre ellos, el condenado esgrimió un cuchillo de cocina y apuñaló a la mujer un total de 18 veces.

Durante el desarrollo del juicio, Julián Conde Ingelmo declaró no recordar los hechos que se imputaban por estar en ese momento bajo los efectos del síndrome de abstinencia.

La declaración de dos testigos que afirmaron ver al condenado abandonar el lugar del homicidio cubriendo su cara con una chaqueta y el deambular nervioso que levantó las sospechas de los agntes de Policía antes de su detención son, según el tribunal, indicios suficientes para condenar Conde Ingelmo.

Además de la pena de 14 años, ocho meses y un día de prisión, Julián Conde Ingelmo deberá indemnizar a los familiares de la víctima con 12 millones de pesetas.