Tras precisar que no se alegra de la encarcelación de nadie, Yáñez aseguró a Servimedia que esta "excepción" contrasta con el tratamiento de los presos comunes.

Como prueba de que el Gobierno está detrás de la decisión de Instituciones Penitenciarias, argumentó que la han impulsado en agosto "sabiendo que esta medida impopular no se podía tomar en la plentud del periodo de sesiones", una actitud que consideró "típica de los malos gobiernos".

"La Dirección General de Instituciones Penitenciarias actúa a las órdenes de los Ministerios de Interior, de Justicia, y del presidente del Gobierno, y una aplicación de tercer grado nada más y nada menos que al señor Conde, no es algo que se tome sin el conocimiento y la aprobación del presidente del Gobierno", aseguró.

Yáñez recordó que los "independientes", juristas y psicólogos, "votaron en contra" de la oncesión del tercer grado y reiteró que esta decisión aumenta la sensación ciudadana de que la Justicia está "desprestigiada".

La situación, junto a las imágenes del presidente del Gobierno, José María Aznar, "dándose un chapuzón ridículo" en la playa dan "una imagen de república bananera que no nos merecemos", concluyó.