Moreiras adoptó esta decisión en un auto de apertura de juicio oral contra Conde y otros tres imputados en la causa, Fernando Garro, Paulino Elorriaga y Lorenzo Pericats.

Según informaron fuentes judiciales, el auto de Moreiras específica los delitos que imput al ex presidente de Banesto, ordena la prisión incondicional de Conde y, al parecer, otras medidas de carácter económico supuestamente destinadas a hacer frente a la fianza de 600 millones de pesetas en concepto de responsabilidad civil que el fiscal pidió para él.

Tras dictar este auto, Moreiras ordenó a la Policía la búsqueda y detención de Conde, quien fue trasladado cerca de las tres de la tarde a la Audiencia Nacional. Allí fue conducido a la comisaría de esta sede judicial, donde permanecía pasdas las tres y media de la tarde a la espera de ser llevado a prisión.

Conde vestía un traje gris y pudo ser visto en la planta de la comisaría de la Audiencia Nacional hablando por un teléfono inalámbrico. A su llegada a la Audiencia no se encontraban en el edificio ni el juez Moreiras ni el fiscal del caso, por lo que el auto de apertura de juicio oral le fue notificado por la secretaria del juzgado de Moreiras.

La decisión de Moreiras se produce después de que el fiscal del caso, Ignacio Gordilo, solicitara siete años de cárcel para Mario Conde por su implicación en el "caso Argentia Trust", en el que supuestamente se habría apropiado de 600 millones "sirviéndose como medio para obtener dicha cantidad de una factura inauténtica".

Gordillo solicitó la imposición de una fianza de 600 millones a Conde y que Elorriaga, Pericats y Garro indemnicen a Banesto de forma conjunta y solidaria con 44,8 millones de pesetas.

El "caso Argentia" se remonta a junio de 1990 cuando Banesto, a través de na subsidiaria denominada Banesto Banking Corporation, abonó 600 millones de pesetas a una sociedad suiza: Argentia Trust.

Mario Conde declaró ante el juez Moreiras que ese pago se hizo con el objetivo de "crear un clima político favorable" a la constitución de la Corporación Industrial de Banesto, para la que había solicitado fuertes bonificaciones fiscales al Ministerio de Economía.

Afirmó también que él personalmente ordenó la transferencia de 600 millones de peseta a Argentia Trust, pero esa antidad no figura en ninguna partida de la contabilidad de Banesto.