Esta materia abordaría la historia de las religiones, de forma aconfesional y, al igual que la Religión, no contabilizaría para optar a becas o hacer media, aunque sí para repetir curso.

Carbonel recalcó, en declaraciones a Servimedia, que esta propuesta es un borrador, no un texto definitivo. Tras esta puntualización, se reconoció satisfecho con esta posibilidad, porque con ello "se va a evitar que buena parte del alumnado ignore la cultura y la filosofía de los países que han tenido mayor peso en la Historia".

No obstante, insistió en que la Religión debería tener el mismo tratamiento que las demás materias, como sucede "en casi toda Europa". Además estimó que, en España, "más del 80% de los padres matriculan a sus hijos en Religión". Una asignatura que, según añadió, también transmite valores.

La propuesta del ministerio para la Secundaria también incluye la posibilidad de que, aquellos alumnos cuyos padres lo prefieran así, no den clase ni de Religión ni de esta alternativa laica. De este modo, pasarían esta hora en la biblioteca o haciendo otras actividades.

A este respecto, Carbonel afirmó que "los padres tienen el derecho a preferir esa opción aunque, de hacerlo, creo que están desaprovechando la oportunidad de que sus hijos conozcan mejor la Historia y tengan una formación más completa"