La Administración autonómica ha estado recopilando aportaciones y propuestas de todas las entidades y grupos políticos, para que sea una norma que represente los intereses de todos los colectivos implicados. Posteriormente, el borrador será enviado a la Asamblea de Madrid para su debate y aprobación, según señaló González.

La finalidad de la Ley Integral contra la Violencia de Género es dar una respuesta global a este fenómeno y, con su puesta en marcha, se incorpora un concepto más amplio de esta conducta, en el que está incluida no sólo los malos tratos que sufren las mujeres en el ámbito doméstico o afectivo, sino también los que padecen en los ámbitos laboral (acoso sexual) y social (agresiones sexuales, tráfico con fines de explotación sexual y mutilaciones genitales).