La Comunidad de Madrid, dentro de sus actuaciones para potenciar la economía de la Sierra Norte y promocionar el turismo, ha financiado la rehabilitación de algunas construcciones tradicionales (antiguas fraguas, pajares, tinados y casonas).

En el Valle Alto del Lozoya, excepto Pinilla del Valle, todos los municipios disponen de alojamientos rurales de todo tipo, con capacidad para recibir grupos o acoger reuniones de empresas. Los más pintorescos se encuentran en Alameda del Valle, Gargantilla de Lozoya y Rascafría.

La zona cuenta también con un camping, en Gargantilla de Lozoya, para aquellos que prefieran este tipo de alojamiento.

El Valle Medio del Lozoya, enmarcado por las cumbres de Somosierra y los amplios meandros del río Lozoya, presenta una sugerente gastronomía y la posibilidad de realizar actividades como el agroturismo, rutas en bici o a caballo y senderismo.

El Valle Bajo del Lozoya, centrado en los amplios embalses de Puentes Viejas, El Villar y El Atazar, ofrece también una variada oferta gastronómica y de turismo activo (rutas a caballo, deportes náuticos, pesca, escalada, talleres artesanos y de micología, exposiciones artísticas o conciertos).

La Sierra del Rincón, declarada Reserva de la Biosfera por la Unesco en 2005, nos devuelve a un paisaje puramente serrano, con altas cumbres e impresionantes bosques, como los robledales centenarios de los alrededores de Puebla de la Sierra o el extraordinario Hayedo de Montejo.