En declaraciones a Servimedia, Alberdi manifestó que los testimonios de las personas que ya han pasado por la comisión ratifican su opinión de que tras la crisis de la Asamblea madrileña no hay "una trama organizada por el PP para desestabilizar la democracia".

A su juicio, las primeras jornadas de interrogatorios descartan la versión difundida por su partido de que la deserción de Tamay y Sáez está relacionada con "una trama de dimensiones inconmensurables, similares a las del golpe de Estado del 23-F".

La diputada socialista señaló que, en todo caso, de lo que podría hablarse en este episodio es de la existencia de una "corrupción transversal", que surge "unas veces con el PSOE, otras con el PP. Eso sí que existe".

PROBLEMAS INTERNOS

No obstante, indicó que "tampoco es justo lanzar una acusación sobre toda la clase urbanística" ni hacer un reproche a este sector de "forma geeralizada". "No se puede involucrar a todas las empresas, las personas que se dedican al urbanismo o la construcción", opinó.

Asimismo, destacó que lo que sí que se ha puesto de manifiesto en las primeras jornadas de la comisión de investigación es que en la Federación Socialista Madrileña (FSM) hay unos "problemas internos gravísimos", algo que han podido ver los ciudadanos a través de las retransmisiones televisivas de los interrogatorios.

A su juicio, estos problemas afectan a "la forma de selcción de personas, los pactos, los intereses" de la FSM, algo que necesita "reformas" y "tomar ese toro por los cuernos".

Concluyó que esta situación debe resolverse mediante un congreso extraordinario en "un futuro inmediato", no antes de las previsibles elecciones de octubre, donde debieran abordarse cuestiones como que la selección de personas en el PSOE madrileño "esté basada en otros principios".