Situado en un entorno natural privilegiado, en la zona central del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, es un lugar de referencia que, abierto a 1.830 metros de altura, sigue ofreciendo recetas tradicionales.

Novillo, que aportó un artículo a la publicación, señaló la trascendencia de este “refugio de senderistas, ciclistas, esquiadores y caminantes”, ejemplo además de “negocio familiar impulsado con vocación, esfuerzo, talento y sacrificio”.

También valoró “su privilegiada situación en uno de los espacios que mejor representa a la región, con incalculables valores históricos, paisajísticos y culturales”.

El Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, recordó, ocupa una extensión de 33.960 hectáreas, de las que 21.714 están en la vertiente madrileña y 12.246 en la castellano-leonesa; da cabida a más de mil especies vegetales, de las que más de un centenar se pueden considerar de gran interés y 80 son propias de la Península Ibérica.