Según informa el ejecutivo autonómico, con esta partida se logra reforzar la estructura familiar y aumentar la calidad de vida del cuidador, así como favorecer que el mayor pueda permanecer en su entorno habitual.

En estos centros, que suman un total de 165 plazas, se ofrecen programas específicos de descanso que permiten a los cuidadores contar con tiempo libre y reducir su nivel de estrés, mientras que los enfermos reciben atención específica y realizan terapias geriátricas.

La consejera de Familia y Asuntos Sociales, Engracia Hidalgo, visitó hoy uno de los ocho complejos que configuran dicha red y en el que se atienden personas que sufren Alzheimer.

"Este programa", explicó la responsable autonómica, "se dirige a aquellos cuidadores sin posibilidad de relevo, familiares que viven con personas mayores con grave deterioro cognitivo, cuidadores de edad avanzada, con problemas de salud o simplemente aquellos familiares que necesitan realizar alguna actividad los sábados y domingos o trabajan fuera de casa los fines de semana".

Esta iniciativa empezó como una experiencia piloto en tres instalaciones de la capital (Mirasierra, Peñuelas y Madrid Sur) y ante su éxito se amplió a otros centros de la capital, San Fernando de Henares, Leganés y Móstoles.