Los programas que integran las Becas Fulbright ascienden a siete, de los que cinco están dirigidos a las áreas de Investigción, Sanidad y Consumo, Economía y Hacienda, Administraciones Públicas y Periodismo, éste último financiado por la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales) y patrocinadas por tres firmas comerciales.

Los fondos de estas becas proceden del Gobierno español, principalmente, y del Congreso de los Estados Unidos,, en menor medida, aunque la tendencia en los últimos años es a buscar fondos de otras entidades u organizaciones privadas, según explicó hoy María Jesús Pablos, directora ejcutiva de la Comisión de Intercambio Cultural entre España y los Estados Unidos.

Este programa de intercambio es, además, uno de los que más presupuesto tiene de los conocidos, ya que para este año cuenta con casi 700 millones de pesetas, una cifra ajustada para años de crisis porque han conocido mejores épocas. Aproximadamente, un alumno becado por Fulbright recibe unos cuatro millones de pesetas al año para pagar su estancia.

En España, el organismo encargado de gestionar estas becas es la Comiión para el Intercambio Cultural entre España y los Estados Unidos, situada en la madrileña calle Martínez Campos, 24 de Madrid, en donde se ofrece todo tipo de información sobre el funcionamiento de las universidades americanas y los estudios que allí se puede seguir.

Además, este programa también permite que estudiantes norteamerianos y profesores, principalmente hispanistas, estudien e investiguen ennuestro país.

REQUISITOS

Para optar a una de estas becas es necesario cumplir con una seriede requisitos entre los que figuran, en primer lugar, un dominio del inglés, que en el caso de las beca para periodistas debe ser "excelente", poseer un buen expediente académico, y realizar un proyecto de los estudios que se desean iniciar en Estados Unidos.

Según explicó María Jesús de Pablos, el inglés es uno de los elementos que más retrae a los estudiantes a solicitar estas becas, pero los tribunales que las conceden tienen en cuenta muchos otros factores, entre los que destaca el proyecto que prsentan y la estrategia con la que lo defienden.

Así, señaló de Pablos, se podría concluir que el perfil del estudiante Fulbright no se adapta precisamente al estudiante con matrícula de honor en su expediente académico, sino que sería aquel estudiante con inquietudes, una idea clara de lo que quiere estudiar, aventurero, ya que no le importa vivir en otro país, pero también trabajador.

El próximo año se cumple el 35 aniversario de la implantación de estas becas en España. Durante este tiempo unos3.000 estudiantes españoles y nortemericanos se han beneficiado de ellas, entre los que figuran ministros como el actual de Asuntos Exteriores, Javier Solana, o el de Obras Públicas y Transportes, José Borrell.