Los tests tuvieron lugar en una de las veinticinco tiendas "HELP", adornada cada una con el color de un Estado miembro diferente, que se han levantado delante del edificio Berlaymont, sede de la Comisión en Bruselas.

Los comisarios recibieron un certificado con los resultados de las pruebas y consejos sobre los riesgos asociados al tabaquismo pasivo.

Entre marzo y octubre de 2006, la campaña se hará itinerante y viajará por toda Europa, sirviendo de marco para la organización de más de cien actos nacionales.

Así, todos los ciudadanos europeos que lo deseen podrán someterse a pruebas para medir el nivel de monóxido de carbono que tienen en sus pulmones, que se realizarán en las tiendas "HELP" que se instalarán para la ocasión, en las que además recibirán consejos sobre los peligros del tabaquismo pasivo y los medios para dejar de fumar.

Los diseñadores de esta campaña recuerdan que el monóxido de carbono, un gas contaminante extremadamente tóxico asociado a la combustión, constituye uno de los componentes más peligrosos del humo de los cigarrillos.

En Europa, cada año, el tabaquismo tiene un coste sanitario superior a los 100.000 millones de euros, y fumar se ha convertido en la principal causa de mortalidad evitable.