Este grupo de comerciantes independientes pone como condición para cambiar su actitud que sea recibido por algún representante del consistorio durante el día de hoy, y que se negocie una reducción del impuesto.

A lo largo de toda la mañana los comerciantes han protagonizado acciones violentas después de formar un piquete de un centenar de peronas en las calles y obligar a cerrar las puertas de las tiendas que estaban abiertas. Como consecuencia de estas acciones resultaron rotos los vidrios de un autobús y un bar sufrió también destrozos considerables.

Pedro Pascual, uno de los integrantes del grupo de comerciantes concentrados, indicó que no tenían intención de moverse de la entrada del ayuntamiento hasta que puedieran hablar con el concejal de Hacienda, Alfons Bonals, u otro representante.

Los comerciantes tampoco descartaron nueva acciones como cortar alguna calle de la localidad o formar nuevos piquetes.

Según los concentrados, a pesar de que tres de ellos intentaron esta mañana hablar con Bonals, el equipo de gobierno municipal les comunicó que no negociaría porque entiende que el IAE de este año ya está aprobado.

Ayer por la tarde, los comerciantes, reunidos con el concejal de Hacienda, rechazaron la propuesta de aplazar el pago del impuesto hasta el 20 de diciembre en lugar de abonarlo el 30 de octubre. Los no agremiaos dieron por rotas las conversaciones después de que el ayuntamiento no admitiera ninguna modificación en el pago de este año.

El alcalde de l'Hospitalet de Llobregat, Joan Ignasi Pujana, reiteró hoy su voluntad de negociar una solución con el colectivo afectado, pero añadió que rechazaba la violencia.

Un grupo de comerciantes destrozó la puerta del consistorio y apedreó la fachada del edificio en el transcurso de la manifestación de ayer por la tarde, que reunió a unas 1.000 personas, en protesa por el IAE.