Un equipo de científicos holandeses del Centro Médico Universitario de Utrecht ha descubierto que la esquizofrenia es el resultado de factores genéticos que se manifiestan en los primeros años de vida y de factores generados en el entorno del enfermo en años posteriores.

Los autores del estudio midieron, durante su investigación, el tamaño del cráneo y del cerebro de 29 pareja de gemelos, en donde uno de los gemelos padecía esquizofrenia y otro estaba sano. Este grupo de gemelos fue, además, comparado con otras 29 parejas de gemelos, todos ellos sanos.

Los investigadores comprobaron que los gemelos con esquizofrenia y sus hermanos sanos tenían cráneos más pequeños que el grupo de gemelos sanos. El tamaño del cráneo está relacionado con el desarrollo del cerebro antes de los dos años, con lo que los autores del estudio concluyeron que un proceso genético generado antes de ls dos años alteró el desarrollo del cerebro de aquellas personas vulnerables a la esquizofrenia.

Los científicos, además, comprobaron que los gemelos enfermos tenían cerebros más pequeños que sus hermanos gemelos que estaban sanos, con lo que los investigadores pudieron concluir que, además de factores genéticos de riesgo, otro proceso medioambiental que tuvo lugar después de los dos años llevó a un mayor freno en el desarrollo del cerebro.

El descubrimiento permitirá a los científicos identifica los genes implicados en el desarrollo del cerebro, lo que ayudará a encontrar la causa de la esquizofrenia, concluye el informe.