Así se extrae de la edición de 2021 del Observatorio de Agresiones del Consejo Oficial de Colegios Generales de Médicos (Cgcom) que la entidad presentó en una rueda de prensa que tuvo lugar este jueves con motivo del ‘Día europeo contra las agresiones a médicos y profesionales sanitarios’ que tendrá lugar el próximo sábado 12 de marzo, en la que indicaron que más de la mitad de estas agresiones se dan en la Atención Primaria, “la puerta de entrada al sistema”.

El evento contó con la participación del presidente del Cgcom, el doctor Tomás Cobo; el secretario general de la entidad, el doctor José María Rodríguez, quien se encargó de presentar los datos; y el coordinador del observatorio, el doctor Gaspar Garrote, quienes se mostraron agradecidos a la Policía Nacional y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) en su conjunto por darles los datos que les permiten actualizar el observatorio, a los 52 colegios españoles por recogerlos, así como a Fundación AMA, por participar en el observatorio, y a Mutual Médica, quien patrocinó un curso que el Consejo ofreció para prevenir estas agresiones a sanitarios. También tuvieron unas palabras para “los compañeros y compañeras sanitarios de Ucrania, que están pasando una fase horrible”, y mostraron un vídeo con varios testimonios de sanitarios agredidos.

El informe expone que se agredió a muchas más médicas que médicos (un 62% frente a un 38) y que desde 2010, cuando se inició el observatorio, se han recogido 5,649 agresiones. Asimismo, perpetúa la tendencia iniciada en 2015, y se mantiene una continuidad con respecto al año 2019, cuando se registraron 677 agresiones.

En este sentido, señala las 441 del año 2020, aunque al respecto Rodríguez explicó que el registro de un dato tan bajo se debió al estado de alarma a causa de la pandemia por covid-19 que tuvo lugar entre marzo y mayo, “motivo por el cual solamente se atendían urgencias y consultas relativas al virus”.

MÁS MUJERES AGREDIDAS

En el año 2021 se agredió a 121 mujeres más que en 2020, un 68% más que entonces, una situación que el observatorio “no supo explicar”. A su vez, el Consejo registró una media de 2,2 agresiones por cada 1.000 colegiados. Resulta una media ampliamente superada por autonomías como Cataluña, que registró 5,3, aunque desde el observatorio se incidió en que no implica que Cataluña tenga más agresiones, sino que a comparación de otras autonomías tiene menos colegiados. Asimismo, aumentaron las agresiones reportadas en Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña o Baleares; y se mantuvieron iguales en Canarias o Galicia.

En cuanto al perfil de los agredidos, son médicos de entre 36 y 55 años. “Por encima y debajo de esas franjas de edad no suele haber agresiones”, destacaron, al tiempo que señalaron que éstas son inexistentes por encima de los 66. Dichos profesionales trabajan, además, un 51,1% de ellos en atención primaria, un 22% en atención hospitalaria, un 7% en urgencias de atención primaria o un 7,9% en urgencias hospitalarias.

En el 87% de los casos se produjeron insultos y amenazas, mayoritariamente a mujeres, mientras que el 13% restante terminó en lesiones físicas, sufriéndolas en un 56% las mujeres y un 44% los hombres.

En cuanto a la tipología de los agresores en el año 2021, los datos muestran que fueron principalmente pacientes programados (48%), seguidos de los pacientes no programados (27%) y los acompañantes (22%). Asimismo, el informe señala a este respecto que en los tramos de edad inferiores a 40 años el perfil mayoritario es el del hombre, mientras que, en el tramo de 40 a 60 años, son las mujeres las principales agresoras.

Las principales causas de las agresiones, por su parte, fueron las discrepancias con el personal sanitario. Así, estas pueden manifestarse desde por la llamada a la consulta hasta el tiempo que se tarda en ser atendido o en tener una cita, pasando por las discrepancias personales, como no estar de acuerdo con los tratamientos o diagnósticos propuestos; relacionados con las bajas; con el estado de los centros, y, más recientemente, con las pruebas para detectar la covid-19.

CONSECUENCIAS

En cuanto a las consecuencias materiales de estas agresiones, que el Observatorio lleva midiendo desde el año 2018, éstas se han visto reducidas a un 7% en 2021, desde el 14% de la primera medición.

Por su parte, a causa de estas agresiones, solo un 13% de los agredidos solicitaron una incapacidad temporal en 2021, en la línea de la edición de 2019 y algo por debajo del 17% de 2020, cuando Rodríguez explicó que podía deberse a que se juntara con la covid y que, por esta causa, se alargaran las IT.

Por último, y pese a felicitarse por algunos logros, como la reforma del artículo 550 del Código Penal que tuvo lugar en 2017 y que consideraba “autoridad sanitaria” al profesional sanitario, los médicos pidieron en un manifiesto al Ministerio de Sanidad, consejerías autonómicas del ramo, FCSE, ministerio de Justicia y profesiones que se unifiquen criterios “y que vayan de la mano para conseguir que este acto no tenga que hacerse porque las agresiones sean cero”; destacaron que pronto el día empezará a ser internacional por las agresiones registradas en América Latina, y refrendaron en él varias premisas. Así, subrayaron que la profesión sanitaria no ha sido ajena al aumento de la violencia en la sociedad, aseguraron que “podrá encontrársele explicación, pero no justificación”, señalaron que sus profesiones tienen un componente de servicio público y que, por tanto, que les agredan tiene repercusión social; y recordaron que las agresiones generan desconfianza y que esta tiene consecuencias negativas en la asistencia.

Por ello, pidieron a los ciudadanos que respeten los derechos de los sanitarios, que asuman sus deberes para con ellos “con confianza y respeto”, e instaron a las administraciones a promover campañas que disminuyan y erradiquen las agresiones, a lograr que los procedimientos sean “rápidos, expeditivos y ejemplarizantes” y a crear un ‘Plan Nacional Contra las Agresiones a Sanitarios’ que cuente con la participación de todos los implicados.

“No somos ni héroes ni villanos, solo somos profesionales sanitarios al servicio de los ciudadanos. Ante el maltrato a médicos, tolerancia 0” concluyó el doctor Gaspar Garrote, quien se encargó de leer el manifiesto.