En la actualidad la silvicultura, a pesar de ser una actividad económica importante por sí misma, proporciona menos empleo que la agricultura. En el norte deEspaña, la superficie cubierta por bosques es del 50 por ciento, pero esa actividad sólo cubre el 5 por ciento del empleo total.

Según un documento que han presentado a la Comisión Europea y al que ha tenido acceso Servimedia, los ecologistas recuerdan que la conservación de la vida silvestre en las explotaciones agrícolas, bien planificada, puede proporcionar una actividad extra a los agricultores en épocas con poca actividad agraria o cuando los ingresos por este concepto son bajos.

Asímismo, sgún el informe, puede ser socialmente más beneficioso mantener a los agricultores en tierras marginales que permitir su abandono y reforestación, porque en áreas con alto riesgo de incendios, esa política puede ser mucho menos cara y más efectiva.

La CODA sugiere algunos criterios de gestión para integrar la agricultura y la silvicultura como son: permitir el pastoreo extensivo en las áreas reforestadas cuando pasen de los 5-8 años en el caso de las especies de crecimiento más rápido, como eucaliptospinos, y en cortafuegos y bosques naturales.

Asímismo, recomienda desarrollar un plan de manejo de los pastos, incluyendo el asesoramiento a los ganaderos sobre cómo mejorar su calidad y sobre la gestión de los diferentes tipos de ganado.

Planificar las plantaciones y los pastos de una forma integrada, tomando como unidad básica de gestión la cuenca hidrográfica, y dotar a las explotaciones con vallas móviles para obtener un pastoreo más efectivo dentro y fuera de las plantaciones forestales, so otras de las propuestas presentadas a la CE por la coordinadora ecologista.