EL COBRO DE CHANTAJES UELVE A LLENAR LAS ARCAS DE ETA, SEGUN PUBLICA EL DIARIO "EL PAIS"
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
ETA ha logrado recomponer y reforzar su dirección, ha elaborado una estrategia a largo plazo y dispone de grandes sumas de dinero obtenidas mediante el cobro del denominado "impuesto revolucionario", según informa en su edición de hoy el diario "El País,", que cita fuentes de la lucha antiterrorista.
La dirección de la banda terrorista, que ha vuelto a hacerse con el control político de la organización ha decidido reservar sus comandos para acciones de gran envergadura, a la vez que pretende una movilización general de todos los grupos políticos de su entorno, fundamentalmente con vistas a diversas reivindicaciones sociales.
Según el mencionado rotativo, los últimos golpes asestados por la policía y la Guardia Civil a ETA, entre ellos la captura del "número dos" de la banda, Félix Albeto López de la Calle, no han logrado debilitar su estructura.
ETA ha decidido reservar sus comandos armados paa acciones terroristas de alto nivel e incentivar a otros grupos de su entorno para que realicen sabotajes a pequeña escala.
Los etarras, según consta en diversos documentos interceptados por la policía, consideran que "ambas cosas son necesarias, pero no es conveniente quemar comandos con sabotajes pequeños", al tiempo que señalan que este tipo de lucha armada de baja intensidad "es una cantera fiable para elegir elementos preparados que puedan dar el salto a un 'talde' (grupo) armado".PROTAGONISO
Por otra parte, el periódico asegura que ETA ha vuelto a recobrar su protagonismo en la elaboración de la estrategia política y militar, aunque la coordinadora KAS sigue teniendo influencias.
Los expertos consideran que las organizaciones afines a ETA van a desarrollar en breve una gran agitación callejera sobre cuestiones como el euskera, la insumisión y otros asuntos que despiertan una gran sensibilidad social.
Un mando de la lucha antiterrorista consultado por "El País" ha explicado quelos últimos activistas de ETA detenidos lo han sido con cantidades de dinero más altas de lo que era habitual en los últimos años, pese a que la policía se incautó en octubre pasado de unos 150 millones de pesetas en la fábrica de explosivos etarra de Mouguerre (Francia).
Oficialmente se sostiene que hay muchas personas que se niegan a ceder al chantaje, pero un experto anti-ETA afirma: "Les basta con el porcentaje de los que pagan: la mejor prueba es que no han recurrido al secuestro de ningún industial".
(SERVIMEDIA)
01 Mayo 1995
M