Cobo acusó en rueda de prensa a la oposición de hacer una denuncia contra las obras de la M-30 con un planteamiento político y afirmó que lo único que les interesa es "hacer ruido". Insistió en que los ciudadanos ya dijeron que sí a las obras en las elecciones y señaló que la Unión Europea (UE) no puede valorar la cuestión política.

"Estamos encantados de que se pronuncie la UE" sobre las obras, aseguró, pero recalcó que si lo que se discute es si hay algún defecto procedimental o alguna falta o irregularidad, "deberán ser los técnicos los que lo expongan, como fueron los técnicos-jurídicos del ayuntamiento los que acudieron al juzgado".

A este respecto, la concejala de Urbanismo, Pilar Martínez, dejó claro que es a los tribunales a los que compete decidir si la M-30 es una vía urbana, "y en España ya se han pronunciado" con la reciente sentencia de un juzgado de lo contencioso-administrativo que avala la posición del ayuntamiento y aclara que se trata de una vía urbana, por lo que no es necesaria la declaración de impacto ambiental.

Para Martínez, si el eurodiputado socialista Carlos Carnero cree que no se ha traspuesto bien el derecho europeo al nacional, lo que debe hacer es "pedir a su propio partido en el Gobierno de la nación que traslade bien la normativa europea a la española" y "nos ahorraremos todo esto".

Tanto Martínez como Cobo insistieron en que el Ayuntamiento de Madrid está cumpliendo con la legislación autonómica y nacional, como demuestra el propio Consejo de Estado, que ya dijo que la M-30 es una vía urbana, por lo que las obras no precisan de declaración de estudio ambiental.

Sobre la petición de Ecologistas en Acción de que se limite a 50 kilómetros la velocidad en la M-30 al ser una vía urbana, Cobo dijo que es un asunto que no se ha planteado y explicó que en esta vía urbana, de acuerdo con los criterios de movilidad que se fijen, se establecerán las limitaciones de velocidad o prohibiciones como en cualquier otra calle.

No obstante, el vicealcalde aclaró que el hecho de que se circule a más velocidad no implica que no sea una vía urbana. Cobo cree que con todo este "ruido", lo que se quiere es desviar la atención de que las obras cumplen la legislación medioambiental. "El proyecto, ecológica y ambientalmente, es magnífico para esta ciudad", aseguró.