Fenómenos como el huracán Katrina están siendo devastadores para la economía del Gobierno, seguros y clientes. Por este motivo, CERES advierte de que si no se adoptan medidas específicas de prevención relacionadas con el cambio climático podrían producirse grandes pérdidas financieras en el futuro.

De hecho, señala la coalición, antes del Katrina los consumidores y compañías estadounidenses ya empezaron a notar el incremento de las primas y restricciones en los seguros, principalmente en Florida, Texas y California.

Además, CERES señala que la tendencia creciente de los problemas relacionados con el cambio climático y el consecuente incremento de los seguros privados afectarán directamente al Gobierno, que deberá adquirir mayores responsabilidades financieras al convertirse en el último recurso.

Por ello, recomienda a las aseguradoras recopilar más información sobre las pérdidas relacionadas con el cambio climático e incorporarla en sus análisis de riesgos, y promover la acción política para reducir las emisiones de gases contaminantes.

Respecto al Gobierno, la coalición recomienda la asociación público-privada para los seguros de riesgo, la realización de análisis financieros ante posibles desastres climatológicos, y adoptar medidas para evitar el calentamiento del planeta.